
Regresar al VAB es una operación arriesgada en las presentes circunstancias. En la rampa 39B existe protección contra los vientos y los rayos hasta cierto punto. Pero de camino al VAB, dicha protección desaparece: no se puede mover al Shuttle sobre el “crawler”, el vehículo oruga que lo transporta de un lado a otro, con vientos de más de 40 nudos y aparato eléctrico cercano.
Se ha despachado un crawler hacia la zona de lanzamiento, listo para llevar a su carga hasta el VAB si así se ordena. Otro crawler intentó sacar de su zona de montaje a algunos de los elementos de la próxima misión, que se estaban ensamblando, pero un problema en el vehículo obligó a regresar al punto de partida. Eso hace que el Atlantis, en caso de retornar, deba entrar al edificio por otro lado y prolongar así el tiempo requerido para la maniobra (tres horas más). (Foto: NASA)
Shuttle
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