Informe ISS

Después del exitoso cambio de puerto de atraque de su cápsula Soyuz, los miembros de la expedición de larga duración número 14 de la estación espacial internacional han vuelto a sus experimentos científicos y al mantenimiento rutinario del complejo. También han encontrado tiempo para celebrar los primeros 100 días en órbita de uno de sus componentes, el alemán Thomas Reiter, quien llegó a la ISS a bordo del transbordador Discovery, en julio. Reiter regresará a la Tierra precisamente en el mismo vehículo, en diciembre, cuando éste traiga al miembro sustituto, Suni Williams.
La dirección del programa ha confirmado que el generador Elektron continúa sin funcionar, a la espera de los recambios que deberían llegar a bordo de la próxima nave de carga Progress. Mientras tanto, el oxígeno para mantener la presión en el interior del complejo proviene de los tanques situados en el exterior del módulo estadounidense Quest.
Otro problema es el fallo por vibraciones del giroscopio CMG-3, que ha hecho que la NASA ordenara su desactivación. La estación posee cuatro CMG, tres de los cuales resultan necesarios para una orientación correcta de la estructura orbital, un sistema que ahorra combustible para esta tarea. Los técnicos están estudiando qué hacer con el CMG-3 y cómo afectará su desactivación a la llegada de la próxima misión de la lanzadera, la STS-116.
Durante la semana, los astronautas han tomado muestras de agua y han pasado chequeos médicos rutinarios. Además, se ha almacenado basura y otros artículos no deseados en el interior de la nave Progress (22P) que aún permanece unida a la ISS. López-Alegría, entre otras tareas de mantenimiento, cambió un separador de agua en un dispositivo del módulo Quest, cuyo filtro debe mantenerse limpio y que no había sido revisado desde la expedición número 5. Los astronautas, por otro lado, han empezado a preparar una demostración de emisión de televisión en alta definición desde el interior de la estación espacial. (Foto: NASA)

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