notesp

viernes, 4 de febrero de 2011

Hace 50 Años (96): Sputnik-7

El equipo de ingenieros que preparó el programa soviético Mars (Object 1M) desarrolló en paralelo la serie de sondas Venera (Object 1V). Ambos diseños son muy semejantes. Las dos primeras Mars no consiguieron viajar hacia Marte en octubre de 1960, a consecuencia de sendos fallos en la fase de propulsión del vuelo. Por tanto, no pudo verificarse lo acertado de la concepción estructural de las sondas. Ya en 1961, se abre una ventana de lanzamiento hacia Venus que permite, con mínimas modificaciones, enviar hacia ese planeta las 1VA. No se trata de un reto pequeño, pues hasta ahora ninguna nave interplanetaria soviética ha conseguido alcanzar la órbita terrestre (dos fallos de dos intentos). Al igual que las 1M, la 1VA no es sino un módulo instrumental cilíndrico presurizado. Tanto en su interior como alrededor de su superficie se hallan varios instrumentos y sensores científicos. Las necesidades de la misión obligan a transportar un sistema de producción eléctrica (ninguna batería podría proporcionar electricidad durante un viaje tan largo), así que la nave está equipada con dos paneles solares independientes. De pequeñas dimensiones, están montados tangencialmente sobre el cuerpo central. En el lado opuesto se ha colocado una antena parabólica de 2 metros de diámetro, encargada de mantener el contacto entre la sonda y la Tierra y que no deberá ser desplegada hasta la llegada a Venus. En el otro lado, una pértiga se extiende con una longitud de 2,4 metros, en la cual se ha instalado una antena omnidireccional fija. La primera se usará cerca de Venus y la segunda durante el viaje. En la parte superior del vehículo se encuentra una semiesfera repleta de instrumentos. Su tamaño, comparado con las posteriores Venera, es pequeño. Entre lo que se lleva a bordo destacan detectores de partículas, un magnetómetro y sensores de navegación. Un sistema integrado es capaz de calcular la posición de la nave en el espacio y transmitir el resultado a la Tierra. A pesar de la ausencia de un motor de corrección de trayectoria, sí existe un modo de orientar la nave adecuadamente para que los rayos solares alimenten de manera eficiente a los paneles y para efectuar los contactos con nuestro planeta. El equipo científico, en general, podrá medir la presencia y la energía de los rayos cósmicos, la intensidad de los campos magnéticos, detectar pequeños micrometeoritos, etcétera. Finalmente, la nave transporta un escudo de armas de la Unión Soviética con la forma de una esfera de aluminio que se asemeja a la Tierra. En su interior se ha alojado un medallón con un plano del Sistema Solar y algunas reseñas históricas de la misión. La esfera en forma de Tierra se encuentra a su vez en un compartimiento construido mediante pequeños elementos octagonales de acero inoxidable, cada uno de ellos con el escudo de armas de la URSS dibujado en su superficie. La nave tiene una altura de 2 metros y su cuerpo cilíndrico principal mide 1 metro de diámetro. La masa total de la Venera alcanza los 644 kg. Como el año anterior, durante la oportunidad marciana, se han preparado dos sondas, supuestamente idénticas, para su lanzamiento. Dos vehículos permitirán calibrar y contrastar mejor los resultados obtenidos, aumentando así el nivel de fiabilidad. La utilización del vector 8K78 permitirá la satelización en órbita de aparcamiento de la sonda y su etapa de escape. Sin embargo, aún debe probarse el hecho de que los motores de dicha etapa hagan ignición en las duras condiciones que imperan en el espacio. Si todo sale bien, la nave se dirigirá hacia Venus en una sencilla ruta de sobrevuelo. Llegado el momento, el despegue se efectúa (con dos días de retraso), posibilitando que el 8K78 coloque a su carga (la sonda y la etapa Blok L) en la órbita de aparcamiento prevista. Pero después, nada más sucede. Tras 60 minutos de “costeo” orbital, un transformador del sistema de energía de la etapa Blok L falla y el cronómetro, sin electricidad, no puede enviar la señal de activación de su motor. Unida aún a su etapa superior, la primera Venera queda varada en órbita terrestre. Ante la prensa, el lanzamiento recibe el nombre de Sputnik-7 (o también Tyazholiy Sputnik 4), reconociéndole sólo una sencilla tarea de investigación científica alrededor de la Tierra. También se anuncia su masa: 6.483 kg, lo que le vale el calificativo de “Sputnik Pesado”. Será la propia NASA quien, en septiembre de 1962, anunciará la verdadera misión del Sputnik-7: volar hacia Venus. En una órbita terrestre tan baja, la 1VA número 1 se quemará pronto en las capas más densas de la atmósfera. Mucho antes, Korolev y su OKB-1, que ya saben lo que ha ocurrido, revisan por enésima vez y preparan para el lanzamiento a la segunda sonda de primera generación con destino a Venus. (Foto: NASA)
-Número de Lanzamiento COSPAR: 1961-Beta 1
-Número SSC: 00071
-Hora de Lanzamiento: 01:18:03 UTC
-Zona de Lanzamiento: Baikonur NIIP-5 LC1
-Nombre de la Carga Útil: Tyazholiy Sputnik 4 (1VA No. 1) (Sputnik-7) (Venera)
-Masa al despegue: 644 kg.
-Organización Responsable: NII-88 (URSS)
-Lanzador: 8K78 (Molniya) (L1-7)
-Orbita Inicial: 212 por 318 km, inclinación 65 grados, período 89,8 minutos
-Reentrada: 26 de Febrero de 1961.

jueves, 3 de febrero de 2011

Cosecha de Planetas Para el Kepler

La comunidad astronómica se halla sin duda en un momento revolucionario en el campo de los planetas extrasolares. La NASA ha hecho oficiales nuevos resultados proporcionados por el observatorio Kepler, y entre el gran número de planetas candidatos (aún deben ser confirmados), empiezan a surgir aquellos de tamaño terrestre, y aún mejor, que se hallan a distancias de su estrella compatibles con la existencia de agua líquida en sus superficies, es decir, que podrían ser aptos para algún tipo de vida. El Kepler no está revisando el cielo de forma sistemática, sino sólo una parte pequeña de éste, de modo que el número potencial de planetas en el universo cercano promete ser enorme. Según las últimas noticias, Kepler ha identificado hasta la fecha un total de 1.235 candidatos a planetas extrasolares. De estos, 68 tendrían el tamaño de la Tierra, 288 se denominan súper-Tierras, 662 tienen las dimensiones de Neptuno, 165 de Júpiter y 19 serían mayores que este último. Lo más interesante es que 54 candidatos se hallan en la correspondiente “zona habitable” de su estrella, es decir, pueden tener agua líquida en superficie, y que de éstos, cinco tienen el tamaño de la Tierra, siendo el resto algo mayores o mucho mayores. Estos últimos podrían tener lunas igualmente habitables. La zona habitable tiene una posición variable según el tipo de estrella. Una estrella fría y pequeña tendrá dicha zona muy cerca de ella, y otra muy cálida la tendrá más lejos. Los científicos han detectado asimismo que seis de los candidatos a planetas se encuentran alrededor de una única estrella, Kepler-11, a 2.000 años-luz de nosotros. Son seis planetas que pasan por delante de su estrella (que efectúan tránsitos), y por tanto su sistema podría tener aún más integrantes desconocidos. El trabajo del Kepler, sin embargo, no ha terminado en absoluto. Los resultados hasta la fecha provienen de observaciones realizadas desde el 12 de mayo hasta el 17 de septiembre de 2009, que implicaron la revisión de las 156.000 estrellas del campo de visión disponible, el cual cubre 1/400 del cielo. Unas 170 de las estrellas parecen tener más de un planeta. Los candidatos podrán ahora pasar a ser planetas de pleno derecho si son confirmados por observaciones desde tierra y por otras realizadas por el telescopio espacial Spitzer. (Foto: NASA/Wendy Stenzel)

Kepler

miércoles, 2 de febrero de 2011

El Primer Satélite Geo-IK-2 No Alcanza la Orbita Prevista

El quinto lanzamiento espacial del año podría ser el primero en haber fracasado. Rusia lanzó desde el cosmódromo de Plesetsk, a las 14:00 UTC del 1 de febrero, un cohete Rokot-KM con un satélite militar científico a bordo. Pero el cohete dejó a su carga en una órbita elíptica y no circular, como estaba previsto. Todo parece indicar que la etapa superior Briz-KM no llegó a encenderse de nuevo para llevar al satélite hasta los 1.000 km de altitud programados. El satélite, llamado Geo-IK-2 (11L), se encuentra en una órbita polar, y por el momento no ha contactado con la Tierra. Su objetivo debía ser efectuar tareas de geodesia (análisis de la gravedad terrestre, del ritmo de rotación de la Tierra y de su forma), que ayudarían a entender mejor nuestro planeta, la tectónica de placas y otras características útiles tanto para la ciencia como para los militares. Este primer Geo-IK-2 (14F31) será seguido por un segundo ejemplar dentro de este mismo año. Forma parte de la red Musson-2 y es una sustancial mejora respecto a la serie anterior Geo-IK. Ha sido construido por la compañía SS Reshetnev sobre una plataforma parecida a la del satélite Uragan-M. Dispone de dos paneles solares y pesa unos 1.400 kg. A bordo transporta un altímetro radar SADKO proporcionado por la empresa europea Thales Alenia Space, retrorreflectores láser y receptores GLONASS y GPS. Rusia ha iniciado la investigación, a la espera de poder contactar con el satélite y de que pueda sacarse algo de provecho de él en su precaria órbita actual. (Foto: SS Reshetnev)

martes, 1 de febrero de 2011

El Discovery Vuelve a Estar en la Rampa de Despegue

El transbordador Discovery salió del edificio de ensamblaje de vehículos a las 19:58, hora de Florida (00:58 UTC), del 31 de enero, en dirección a la rampa de lanzamiento 39A. El gigantesco conjunto, movido por el vehículo tractor, tardó unas siete horas en llegar a su destino (07:53 UTC), a unos 5 km de distancia. Una vez asegurado, el Discovery empezará a ser preparado para el despegue, previsto para el 24 de febrero. (Foto: NASA/Kim Shiflett)

Shuttle

lunes, 31 de enero de 2011

La Progress M-09M Llega a la ISS

Completado su viaje desde la Tierra, la nave de carga rusa Progress M-09M alcanzó las inmediaciones de la estación espacial internacional el sábado 30 de enero y se acopló a su módulo Pirs, de forma automática, exactamente a la hora prevista, las 02:39 UTC. Su sistema Kurs guió a la nave hasta el puerto de atraque, bajo la vigilancia de los astronautas del complejo orbital, y posibilitó la unión sin ninguna dificultad. Alexander Kaleri y Oleg Skripochka, quienes habían permanecido junto al sistema TORU de control remoto, listos para intervenir en caso necesario, no tuvieron que interrumpir el proceso automático y hacerse cargo de la maniobra. Con la nueva Progress rusa y la japonesa Kounotori-2 ya “en casa”, la ISS esperará ahora la llegada de un tercer vehículo logístico, el ATV-2 europeo. Llamado Johannes Kepler, está siendo preparado en la base de Kourou, en la Guayana Francesa, desde donde despegará el 15 de febrero a bordo de un cohete Ariane-5. Con sus 22 toneladas de peso, el ATV-2 se acoplará por sí solo junto al módulo Zvezda, donde permanecerá varias semanas. Transportará un total de 7 toneladas de suministros, la mayor parte combustible y otros consumibles. El resto, unos 1.600 kg, han sido proporcionados por la NASA (1.300 kg) y la ESA (275 kg) y viajarán en la zona presurizada. Se incluyen 96 kg de equipos para investigación, 597 kg de recambios, 636 kg de suministros para la tripulación, 45 kg en forma de ordenadores y otros elementos informáticos, y 26 kg de equipos para paseos espaciales. También viajan 100 kg de oxígeno. Unos 4.000 kg de combustible se usarán para que el ATV-2 ayude a controlar la altitud del complejo orbital durante unos 3 meses, y otros 850 kg serán transferidos al sistema de propulsión del módulo Zvezda. Si todo va bien, tras el despegue del Johannes Kepler será la primera vez que los tres sistemas de transporte de carga automáticos estarán a un tiempo unidos a la estación. Mientras, en Florida, los técnicos completaron las modificaciones y refuerzos en el tanque externo del transbordador Discovery y todo quedó a punto para el traslado del vehículo a la rampa de lanzamiento durante la madrugada del 1 de febrero. (Foto: NASA)

ISS

Rumania, 19º Miembro de la ESA

El 20 de enero, Rumania hizo un paso más para convertirse en el miembro número 19 de la Agencia Espacial Europea. Durante la ceremonia de firmas asistieron el ministro de Asuntos Exteriores rumano, el director general de la ESA y otras personalidades, como el presidente de la agencia espacial del país y el astronauta Dumitru Dorin Prunariu. Rumania participó muy activamente en el programa espacial soviético en los años 70 y 80. En 1992, firmó un acuerdo de cooperación con la ESA y ha participado en varias misiones científicas de la agencia, como Cluster, Herschel, Planck, SOHO y Gaia. Ahora pasará a ser un miembro de pleno derecho de la ESA y podrá participar en las actividades obligatorias y opcionales que ésta emprenda. (Foto: Romanian Space Agency)

ESA/Rumania

Hace 50 Años (95): Samos-2

El segundo satélite Samos E-1/101 (Samos-2), a diferencia de su antecesor, sí alcanza el espacio. Pero pocas son las noticias que se darán sobre su misión. Imbuido en el nuevo ambiente de secretismo implantado por Kennedy, el lanzamiento se anunciará sólo 24 horas antes de que se produzca. Tampoco se efectuarán conferencias de prensa previas ni se hablará de quiénes son los contratistas. Por supuesto, sus objetivos están clasificados. El despegue, el 31 de enero de 1961, se produce normalmente, aunque con dos horas y media de retraso por problemas técnicos (originalmente debía haber partido en diciembre de 1960). Una vez en el espacio, su cámara E-1 empieza a trabajar, obteniendo imágenes de la URSS y transmitiéndolas a la Tierra por radio. Sin embargo, su calidad será muy deficiente debido al ruido electrónico de la transmisión, y con una resolución de sólo 100 a 150 pies. El vehículo también transporta una carga F-1 de inteligencia electrónica para escucha de señales, un detector de rayos cósmicos, un sensor atmosférico y un detector de micrometeoritos. El sistema funciona durante aproximadamente un mes, terminándose las transmisiones en marzo. Resta en el inventario un tercer satélite E-1/101, asignado a la etapa Agena-2103A, pero no será lanzado. Así, esta misión será la última que empleará el vector Atlas-Agena-A. (Foto: USAF)
-Número de Lanzamiento COSPAR: 1961-Alfa 1
-Número SSC: 00070
-Hora de Lanzamiento: 20:21 UTC
-Zona de Lanzamiento: Point Argüello PALC-1-1 (SLC-3W)
-Nombre de la Carga Útil: Samos-2 (E-1) (OPS 1051)
-Masa al despegue: 1.915 kg
-Organización Responsable: USAF (EEUU)
-Lanzador: Atlas-70D-Agena-2102A (LV-3A)
-Orbita Inicial: 474 por 557 km, inclinación 97,4 grados, período 94,93 minutos
-Reentrada: 21 de Octubre de 1973.